La explicación de deportistas estadounidenses a sus gestos de protesta en los Panamericanos

Las imágenes de un esgrimista arrodillado y de una lanzadora de martillo alzando su puño han dado de hablar tras el cierre de Lima 2019.

NUEVA YORK – Las imágenes del esgrimista Race Imboden arrodillado y de la lanzadora de martillo Gwen Berry alzando su puño han dado de hablar tras el cierre de los Panamericanos 2019.

Ambos deportistas estadounidenses realizaron gestos de protestas durante las respectivas ceremonias de premiación de sus disciplinas, situación que levantó polémica.

El Comité Olímpico norteamericano advirtió sobre posibles sanciones para los atletas por no «respetar el compromiso» con el himno de su país. Ante esto, los aludidos se defendieron.

Ambos deportistas explicaron el trasfondo de sus gestos aludiendo que en ningún fondo la intención fue faltarle el respeto a su nación.

«Hay que hacer y decir y cambiar muchas cosas. No estoy tratando de comenzar una guerra política o actuar como si fuera la señorita sabelotodo o algo así. Solo sé que Estados Unidos puede hacerlo mejor», sostuvo Berry en entrevista con la cadena NBC Sports.

«No es ninguna falta de respeto al país. Quiero dejar eso muy claro. En todo caso, lo hago por amor y respeto por las personas en el país, es un testimonio de lo que está ocurriendo», agregó la lanzadora del martillo.

Por su parte, el esgrimista Imboden había justificado su acción poco antes de su compatriota.

«Me siento honrado por representar al equipo de Estados Unidos en los Juegos Panamericanos, llevándome a casa un oro y un bronce. Pero mi orgullo se ha reducido por las múltiples insuficiencias en el país que llevo con tanto orgullo en el corazón. Racismo, control de armas, maltrato a los inmigrantes», argumentó.

Lo de Imboden no es primera vez. Ya se había arrodillado en un evento de su disciplina en 2017 y en enero de este año también explicaba su gesto.

«Es importante hablar y defender a las personas que no tienen voz», decía por ese entonces.

Ante las posibles sanciones que pueden caer por lo hecho en los Panamericanos, el deportista indicó que «perder la esgrima para mí es lo único en mi vida, aparte de mis seres queridos, familiares y amigos, que me afectaría mucho. Escuchar que es algo que podría verse afectado, obviamente, me asusta mucho. Pero no me arrepiento de mis acciones».