La «inmunidad colectiva» de Oregón contra la variante Delta del COVID-19 debería llegar a fines de diciembre, pronostica OHSU
PORTLAND – Lo peor podría llegar a su fín en los próximos dos meses, al menos para la variante Delta.
La tensión en los hospitales de Oregón causada por la variante del COVID-19 altamente transmisible ya ha comenzado a disminuir, según los datos proporcionados por la Autoridad de Salud de Oregón, y un nuevo pronóstico de la Universidad de Ciencias y Salud de Oregón concluye que la disminución de las hospitalizaciones continuará.
Debido a que ahora la variante tiene cada vez menos anfitriones dispuestos al contagio, otro aumento que llevaría a los hospitales a sus límites probablemente no ocurrirá.
«Va a ser cada vez más difícil generar un nuevo aumento en las hospitalizaciones», dijo Peter Graven, un investigador de OHSU que ha estado modelando semanalmente las cifras esperadas de hospitalizaciones por coronavirus desde el comienzo de la pandemia.
Esta perspectiva positiva proviene de analizar las cifras sobre la tasa de vacunación de Oregón (aproximadamente el 71% de la población adulta) y la propagación de la enfermedad hasta ahora entre los no vacunados, así como de considerar el impacto de los mandatos de vacunas federales y el mandato de vacunas de Oregón para ciertos trabajadores, que comienza hoy lunes.
OHSU dice que “aproximadamente el 22% de los habitantes de Oregón siguen siendo vulnerables a la infección” de la variante Delta.
Es probable que los efectos de la inmunidad colectiva para la variante Delta se afiancen cuando aproximadamente el 85% de la población tiene inmunidad por vacunación o infección reciente, y eso está a la vista en Oregón, dijo Graven. Él pronostica que el estado de Oregón alcanzará ese punto alrededor del 26 de diciembre, aunque anticipa que habrá otras 177,000 infecciones en Oregón antes de esa fecha.
Si bien los casos de COVID-19 en el estado de Oregón han tenido una tendencia a la baja en general desde principios de septiembre, un número significativo de las camas de cuidados intensivos del estado todavía están siendo ocupadas por pacientes con coronavirus. Este es especialmente el caso en la parte este de Oregón, donde todavía es más del 40%.
Menos del 5% de los pacientes COVID-19 hospitalizados en Oregón están vacunados.
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