Alcalde de Portland fue gaseado por agentes federales, advierte que «alguien va a morir» durante estas caóticas protestas
PORTLAND – El alcalde Ted Wheeler recibió gases lacrimógenos por parte de oficiales federales junto con una gran multitud de manifestantes la noche del miércoles después de que intentó calmar durante horas a activistas enojados que exigían una reforma policial del ayuntamiento y pidió a las autoridades federales que se retiraran de esta ciudad mayormente liberal, mayoritariamente blanca.
El alcalde fue atrapado en una muestra caótica de violencia y caos que comenzó alrededor de las 11:15 p.m., después de que algunos manifestantes arrojaron bolsas de basura en llamas sobre una cerca que protegía el juzgado federal, lo que provocó que los oficiales federales dispararan gases lacrimógenos contra la multitud.
Wheeler había pasado muchas horas en medio de la protesta, tratando de responder preguntas de la multitud, que abucheó y se burló mientras trataba de explicar un largo proceso para hacer las reformas. En un momento, reconoció que él es un «hombre blanco y privilegiado».
«Obviamente tenemos un largo camino por recorrer», dijo Wheeler. «Todos aquí tenemos un trabajo que hacer, todos nosotros».
Antes de que la multitud sufriera por los gases lacrimógenos, Wheeler se reunió con los líderes locales del movimiento de justicia social Black Lives Matter que le exigieron que se moviera más rápidamente para reformar el departamento de policía.
Algunos activistas dijeron que les preocupaba que la lucha con los agentes federales eclipsara sus demandas de reformas locales, y prometieron mantener la presión sobre Wheeler y los funcionarios de la ciudad de Portland. Una madre blanca señaló que Wheeler solo se presentó a las protestas después de que otras madres blancas que asistieron a las manifestaciones durante el fin de semana fueron gaseadas.
«Ya es suficiente», cantó la multitud. «Suficiente es suficiente.»
Miles de manifestantes abuchearon e interrogaron a Wheeler alternativamente después de que cientos de madres apodadas «el Muro de las Mamás» encabezaran una marcha en el centro contra la brutalidad policial. Muchos manifestantes también llevaban carteles que exigían la retirada de los agentes federales enviados la semana pasada por el presidente Donald Trump sobre la objeción de Wheeler y otros funcionarios locales.
«Es difícil respirar, es mucho más difícil de respirar de lo que pensaba», dijo Wheeler después que lo rociaran con gases lacrimógenos. “Esto es aborrecible. Esto es denigrante».
Mientras que Trump dijo que envió agentes de la ley federal para restablecer el orden, el secretario interino de Seguridad Nacional, Chad Wolf, dijo que los agentes federales estaban en Portland principalmente para proteger edificios federales como el Palacio de Justicia Federal Mark O. Hatfield, que se había convertido en un blanco para los manifestantes.
El miércoles por la mañana contratistas rodearon el edificio con una valla alta de metal y concreto y los fiscales advirtieron que cualquiera que la violara sería arrestado. En los archivos de la corte, las autoridades federales dicen que los manifestantes habían infligido más de $50,000 dólares en daños a edificios federales en Portland, incluyendo daños en las cámaras de seguridad y romper las puertas de vidrio.
Tai Carpenter, presidente de la junta directiva de «Don’t Shoot PDX», una organización sin fines de lucro de justicia social con sede en Portland, dijo que la gran mayoría de los manifestantes simplemente estaban ejerciendo sus derechos de la Primera Enmienda. Llamó a la respuesta federal desproporcionada.
«No es un grupo de anarquistas en primera línea», dijo Carpenter, de 29 años. «Son madres que cantan y padres que trataron de dispersar los gases lacrimógenos con sopladores de hojas. No está tan fuera de control como la gente piensa. Tengo miedo de que los oficiales federales que están aquí terminarán con el asesinato de alguien».
Wheeler se hizo eco de esas mismas preocupaciones después de hablar con los manifestantes el miércoles por la noche.
«El presidente Trump necesita concentrarse en el coronavirus y sacar sus tropas de la ciudad. Mi mayor temor es que alguien muera», dijo Wheeler. «Quiero que se vayan. Esto también puede llegar a otras ciudades si no lo detenemos».
El alcalde intentó caminar por un espacio explosivo del gobierno federal mientras se dirigía a una multitud que solo unos días antes, que los funcionarios federales entraran a la ciudad, se habían organizado en oposición a su oficina.
Como alcalde, Ted Wheeler ayuda a establecer las prioridades presupuestarias de la ciudad. Como comisionado de policía, ayuda a establecer las prioridades para la aplicación de la ley.
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