Darren Cahill, coach de Jannik Sinner, rompe el silencio y sale en defensa de su pupilo

El australiano fue contundente.

NUEVA YORK – El caso de doping de Jannik Sinner fue una bomba en el mundo del tenis. En marzo pasado, durante Indian Wells, el 1 del mundo dio dos veces positivo por una sustancia prohibida llamada clostebol, que aumenta el rendimiento físico.

Sin embargo, el italiano logró probar y negar su culpabilidad, ya que dicha sustancia habría entrado a su cuerpo luego de que su fisioterapeuta le aplicara un spray.

La ITIA (Unidad de Integridad del Tenis) no suspendió a Sinner al considerar la acción como totalmente involuntaria. Fue declarado «inocente». Lo único es que el europeo perdió los puntos obtenidos y el dinero conseguido en el torneo.

La noticia golpeó fuerte al tenis y varios tenistas como Nick Kyrgios, Denis Shapovalov o Lucas Pouille, arremetieron.

Es por esto que Darren Cahill, coach de Sinner, rompió el silencio y abordó el tema.

«Jannik nunca haría algo así de manera intencional. Es una situación desafortunada, pero la verdad salió a la luz», partió diciendo en conversación con ESPN.

¿Recibió un trato favorable? «No creo que haya recibido un trato diferente. No hay duda de que las cosas son más fáciles para los que están en la cima porque pueden permitirse el lujo de tratar de formar un equipo legal que les ayude a encontrar soluciones y justicia, algo que quizá el 500 del mundo no puede hacer», disparó.

«La razón por la que pudo jugar después de la suspensión provisional fue que localizaron el lugar exacto donde ocurrió el incidente y pudieron explicar lo que ocurrió con el spray», dice Cahill, explicando el porqué Sinner pudo jugar todos estos meses pese a la investigación en curso. Incluso, la ITIA ya tiene en su poder las facturas de la compra del spray, que tiene venta libre en Italia.

Finalmente, Cahill aseguró que no hubo ninguna mejora en el juego de su pupilo. Más bien todo lo contrario.

«Habríamos visto un gran cambio en su físico y excitación por estar en la pista, pero lo desgastó física y mentalmente, tuvo amigdalitis y se perdió los Juegos Olímpicos. No estamos buscando dar pena. Solo estamos agradecidos de que no haya una sanción», cerró.