Por qué Donald Trump afirma que será arrestado este martes: Las claves de una investigación que podría ser histórica

La presunta relación del ex Mandatario con Stormy Daniels y el pago para que ésta guardara silencio están en la mira de la fiscalía de Nueva York, que podría juzgar al líder republicano en un hecho sin precedentes.

NUEVA YORK – Los mensajes del ex Presidente de EE.UU. Donald Trump en redes sociales suelen estar cargados de arrebatos y un uso excesivo de mayúsculas. Nada fuera de lo común en su publicación del sábado en Truth Social, aunque esta vez el contenido era mucho más alarmante: «El principal candidato republicano y ex presidente de los Estados Unidos de América será arrestado el martes de la próxima semana. ¡Protesten, recuperen nuestra nación!», escribió.

Las palabras del ex Mandatario, claramente, llamaron la atención y tienen que ver con un hecho concreto: la investigación en su contra que encabeza la fiscalía de Manhattan por el pago hecho a una ex actriz porno para que guardara silencio, justo antes de las elecciones de 2016, en las que venció a la demócrata Hillary Clinton.

El líder republicano -que ya anunció su postulación en las elecciones presidenciales de 2024- basó su información en «filtraciones ilegales de una oficina de la fiscalía de Manhattan corrupta y altamente politizada que ha permitido que se establezcan nuevos récords en delitos violentos y cuyo líder está financiado por George Soros», dijo.

Estos dichos encendieron los rumores en Estados Unidos: medios locales afirman que dentro de estos días la justicia neoyorquina formalizará la acusación contra Donald Trump, quien se convertiría en el primer ex presidente estadounidense acusado de un delito, complicando también sus aspiraciones electorales.

Por ahora, la atención está puesta en el accionar judicial en Nueva York, por supuesto, a la espera de que se cumpla la profecía del ex Mandatario y se lleve a cabo un arresto sin precedentes.

El caso

Corría 2016 y Donald Trump se metía de lleno en su candidatura presidencial. Las opciones de llegar a la Casa Blanca aumentaban exponencialmente y, mientras se aseguraba la victoria en las primarias de su partido, desde el bando demócrata lo miraban con recelo. En ese escenario, el equipo del entonces magnate realizó intensas negociaciones tras bastidores para evitar filtraciones vergonzosas y potencialmente dañinas para el candidato republicano.

De esta forma, en agosto, el tabloide The National Enquirer -cuyo jefe es cercano a Trump- compró por 150.000 dólares a la modelo Karen McDougal los derechos de su historia sobre una relación que ella afirma tuvo con el multimillonario. El objetivo era evitar que sus afirmaciones salieran a la luz por medio de una técnica que se conoce como «catch and kill» en Estados Unidos, donde las cláusulas de confidencialidad son comunes.

Fue ahí cuando salió el nombre de Stormy Daniels. Esta ex actriz porno -cuyo nombre real es Stephanie Clifford- también quería monetizar su historia sexual con Trump, que afirma ocurrió en 2006, cuando él ya estaba casado con su esposa Melania.

El diario puso a Daniels en contacto con uno de los abogados de Trump, Michael Cohen. A fines de octubre de 2016, éste pagó a Daniels 130.000 dólares a cambio de un acuerdo de confidencialidad. El pago fue revelado por The Wall Street Journal en enero de 2018, pero tanto el abogado como el ex Presidente refutaron la información, incluso este último negó en repetidas ocasiones haber tenido una relación con la ex actriz porno.

Pero con el paso del tiempo, Cohen vio cómo el cerco judicial se cerraba en torno suyo y terminó por colaborar con la justicia. Se declaró culpable de fraudes fiscales y bancarios en 2018 ante el tribunal federal de Manhattan, y también de violar leyes sobre el financiamiento de campañas electorales.

«Cohen realizó esos pagos» a Daniels para comprar el silencio de la actriz «con el objetivo de influenciar la elección presidencial de 2016», afirmó entonces el fiscal federal.

Además, la Trump Organization le devolvió a Cohen la suma pagada a Daniels y la justicia estadounidense considera esto como un regalo de campaña no declarado para Trump, algo que viola las leyes de financiación electoral.

En diciembre de 2018, Michael Cohen dijo haber actuado bajo órdenes de Trump y fue condenado a tres años de prisión. La investigación ha seguido su curso y se ha centrado en la presunta responsabilidad del ex gobernante republicano.

Posibles cargos

Ahora, ¿cuáles serían los posibles cargos? «No hay nada criminal en el pago mismo. Lo que es ilegal es falsificar los documentos comerciales de una empresa», explicó a la AFP John Coffee, profesor de derecho de la Universidad de Columbia, especializado en crímenes financieros y de cuello blanco.

«Trump Organization es una empresa» y los reembolsos hechos a Michael Cohen fueron «declarados como destinados a cubrir gastos jurídicos», agrega. Falsas declaraciones, según la justicia estadounidense.

Si los fiscales logran convencer al jurado de que esa falsificación se realizó para esconder otro delito -como un regalo de campaña no declarado- esta infracción puede convertirse en un delito grave, penado con hasta cuatro años de prisión, según el experto.

Pero Coffee dice que este argumento no es necesariamente fácil de probar en la corte.

Como sería el proceso

Con estos antecedentes, la semana pasada, en la oficina del fiscal del distrito de Manhattan, Alvin Bragg, se realizaron «conversaciones preliminares» para planificar una posible acusación y lectura de cargos contra Donald Trump, según informó The New York Times. También hubo reuniones con el Departamento de Policía y los funcionarios de seguridad en los tribunales ante posibles protestas.

Todo esta planificación da señales de la inminente acusación contra el ex Mandatario, tal como él mismo lo advirtió. «Si Trump es acusado y procesado, será uno de los procedimientos judiciales más inusuales y observados de cerca en la historia de Nueva York», adelantó The New York Times.

El mismo medio plantea una serie de dudas frente al proceso. Una de ellas es si Donald Trump comparecerá en las audiencias esposado, aunque podría haber una excepción dado su estatus. La publicación afirma que, lo más seguro, es que el ex Mandatario esté acompañado en cada paso por agentes armados del Servicio Secreto de EE.UU., según indica la ley.

Por otro lado, después de la lectura de cargos, «es probable que Trump sea puesto en libertad bajo palabra porque una acusación probablemente contenga solo cargos por delitos graves no violentos», afirmó el periódico.

Mientras, el ex gobernante llama a sus adherentes a protestar y «defender la Nación». ¿Pasará algo este martes? Estamos atentos.