Reino Unido lanza advertencia a Putin tras detectar un barco espía en sus aguas: «No evitaremos tomar medidas enérgicas»

La nave rusa «Yantar» se encuentra actualmente en el Mar del Norte, tras atravesar la zona marítima británica. El ministro de Defensa informó el despliegue de dos buques desde la isla para monitorear la situación.

LONDRES – El ministro británico de Defensa, John Healey, advirtió este miércoles al presidente ruso, Vladímir Putin, que el Reino Unido actuará con firmeza para proteger al país tras la detección de un barco espía ruso en aguas británicas.

«Lo vemos, sabemos lo que está haciendo y no evitaremos tomar medidas enérgicas para proteger a este país», dijo Healey durante una declaración en la Cámara de los Comunes.

Según el ministro, se trata del buque ruso «Yantar», que actualmente se encuentra en aguas del Mar del Norte, tras haber pasado por la zona marítima de Reino Unido.

«Permítanme ser claro: se trata de un buque espía ruso utilizado para recopilar información y cartografiar la infraestructura submarina crítica del Reino Unido. El Yantar entró en la zona económica exclusiva del Reino Unido a unos 72 kilómetros de la costa británica el lunes», explicó el titular de Defensa.

En respuesta al acceso del barco ruso, estos últimos dos días, la Royal Navy (Armada Real) ha desplegado la fragata ‘HMS Somerset’ y el barco patrulla ‘HMS Tyne’ para vigilar la nave intrusa en todo momento, detalló Healey.

Además, remarcó que esta es la segunda vez que el buque ruso entra en aguas del Reino Unido en los últimos meses.

«Se detectó que merodeaba sobre la infraestructura submarina crítica del Reino Unido. Para disuadir cualquier amenaza potencial, tomé medidas mesuradas como parte de una respuesta directa clara al barco ruso. También, se desplegaron aviones de patrulla marítima de la RAF (Real Fuerza Aérea)» para seguir cada movimiento del Yantar, informó el ministro.

Asimismo, en su discurso confirmó la utilización de un submarino de la marina británica como «medida disuasoria», para hacerle saber a la nave rusa que estaba siendo monitoreada. El Healey afirmó que tras notar la presencia británica, el barco «abandonó las aguas del Reino Unido sin merodear más y navegó hacia el Mediterráneo».