Serbia, el país donde su presidente ha salido fortalecido gracias a la crisis por el covid-19
Desde la llegada del virus, Aleksandar Vucic ha tenido una altísima aparición en los medios de comunicación, llegando a invisibilizar a la oposición de cara a a las elecciones legislativas del 21 de junio.
BELGRADO – El Presidente serbio, Aleksandar Vucic, ha salido fortalecido de la pandemia de covid-19, que le permitió copar los medios de comunicación y marginar a la oposición a dos semanas de las elecciones legislativas del 21 de junio.
Con 251 muertos sobre un total de 12.071 contagios, el país balcánico de siete millones de habitantes ha evitado lo peor, levantando las restricciones a tiempo para las elecciones. El desempeño de Serbia ante el nuevo coronavirus es una bendición para Aleksandar Vucic.
Tras un punto más alto a mediados de marzo, los casos adicionales diarios de covid-19 comenzaron a bajar y la popularidad del presidente a subir.
Casi la mitad de los serbios confía en Vucic, según el instituto de sondeos Ipsos, un récord en 20 años de encuesta de este tipo. Pero los analistas afirman que la crisis de salud ha aumentado la ventaja al líder, dándole una plataforma para dominar los medios de prensa, distribuir ayuda y sofocar las protestas.
«Ocupa todo el espacio público», dijo Dusan Spasojevic, profesor de la Universidad de Ciencias Políticas de Belgrado. De esta forma, el jefe de Estado y sus aliados, ya conocidos por su afán de mostrarse, se han vuelto omnipresentes.
Sin alternativa
En marzo, el oficialista Partido del Progreso (SNS) ocupó el 99% del horario estelar en cinco redes nacionales de televisión, según la red de monitoreo de medios CRTA. En abril, la tasa cayó a 92%.
«El coronavirus mostró el error de aquellos que creían que Vucic aparece demasiado en los medios de prensa, ya que de hecho puede aparecer aún más», bromea Dragosalv Drencic, un taxista de 45 años.
Cuando un equipo chino llegó para auxiliar a Serbia al comienzo de la crisis, el Presidente lo recibió en el aeropuerto rodeado de cámaras de televisión. Posteriormente se encargó personalmente de distribuir los respiradores artificiales, recordó Florian Bieber, especialista en los Balcanes. «Estaba omnipresente mientras que las alternativas eran completamente invisibles», apuntó.
Según analistas, esta distorsión de los medios contribuyó significativamente a consolidar su poder.
En la década de 1990 había sido ministro de Información, de corte ultranacionalista, del ex hombre fuerte Slobodan Milosevic. Diez años después, tomó la decisión táctica de inclinarse hacia Occidente y así obtuvo un apoyo crucial de la Unión Europea.
Después de dos períodos como Primer Ministro, asumió la presidencia en 2017, un puesto honorario, sin grandes prerrogativas.
Boicot opositor
Pero el presidente domina la vida política en tal magnitud que su cargo oficial tiene poca relevancia.
Una ONG como Freedom House ahora cree que Serbia ya no es una democracia sino un «régimen híbrido» con un jefe de Estado que usa «las mismas herramientas antidemocráticas» que el húngaro Viktor Orban.
El control de la prensa no se ejerce mediante la censura sino mediante la asignación de subsidios públicos y recursos publicitarios a los medios amigables. Los medios críticos están sujetos a presiones fiscales.
El SNS no respondió las preguntas de AFP, pero el Presidente dijo a la prensa local que el informe de esa ONG no era «serio» y estaba lleno de información falsa». Pero, reconoció, «hay cosas reales que necesitamos arreglar».
La crisis sanitaria «ha sacado a la luz el estado de la democracia en Serbia porque hemos visto que el poder se concentra en manos de unos pocos», dijo la investigadora Tamara Brankovic.
El Parlamento, que fue boicoteado durante un año por una parte de la oposición que posee aproximadamente un tercio de los escaños, ya era disfuncional. Durante gran parte del estado de emergencia, no se reunió en absoluto.
Algunas facciones de una oposición minada por las divisiones boicotearán las elecciones legislativas, aduciendo que no son libres.
Vucic condenó esta decisión, pero la posible ausencia no lo perturba. «Los que quieren salir, que salgan, y los que no pueden, no tienen que hacerlo. No me importa», dijo.
Leave a Comment
You must be logged in to post a comment.